Ni crudo ni cocinado / Isidro Ferrer

Ni crudo ni cocido es el título de la exposición y también una declaración de intenciones puesto que las obras del diseñador afincado en Huesca pueden observarse como si tuviesen un aspecto exterior algo crudo y un contenido interno muy cocido. Todo ello pesado como una reflexión sobre la naturaleza y la cultura, que le permite sacar a la luz obras inteligentes para ver las cosas como nunca habían sido vistas.

Carteles, pequeñas esculturas, ilustraciones para diarios, juegos, trofeos, portadas de libros y publicaciones forman parte de esta exposición, que permitirá descubrir la originalidad de un autor, cuya trayectoria artística (ganó el Premio Nacional de Diseño en el 2003, entre otros galardones) puede calificarse de sólida, fructífera y, sobre todo, atractiva y personal. Y también universal.

Porque Isidro Ferrer juega todo el tiempo reciclando objetos, reescribiendo palabras, redefiniendo mensajes. Desde sus carteles contra la guerra, pasando por sus animaciones para televisión o publicidad, su obra está cargada de una intencionalidad que va más allá de la imagen.

Como observador, el artista pone en juego formas, texturas, colores y sensaciones con el único afán de comunicar lo que él quiere, creando en muchas ocasiones un nuevo lenguaje totalmente independiente de la idea inicial. Una idea que nace de las manos, de sus creaciones, del papel y el lápiz y que se transforma gracias a la tecnología; aunque reflejando siempre su trabajo manual, al que nunca ha renunciado a él.

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